Noche de Cuaresma con el Cautivo en el Tiro de Línea

Eduardo Fdez. López. Ambiente en las calles, olor a incienso y calles húmedas por la lluvia del día y lo más importante, un barrio detrás de su Cautivo, son los síntomas clásicos del penúltimo viernes de Cuaresma en el Tiro de Línea.

Como cada año el penúltimo viernes del tiempo previo a la Semana Santa la Hermandad de Santa Genoveva organiza el Vía Crucis con la imagen de su titular por las calles de la feligresía.

A las nueve de la noche salía por la puerta de la parroquia las andas con la imagen portadas por los hermanos de esta cofradía del Tiro de Línea.

Comenzaba así el rezo de las catorce estaciones y este año por la posibilidad de que volviera a aparecer la lluvia se decidió acortar el recorrido, rezando el Vía Crucis por las calles mas cercanas a la parroquia, aligerando la entrada y rezándose las dos últimas estaciones dentro de la misma al comenzar a lloviznar.

La Cruz de Guía con dos faroles, dos tramos de hermanos con cirio y las voces del coro de Nuestra Señora de las Mercedes antecedían al Señor Cautivo, mientras que una gran cantidad de fieles caminaban como cada Lunes Santo tras sus pasos.

A las diez de la noche regresaba el Cautivo a su casa, una hora bendiciendo las calles de un barrio y visitando a los vecinos a los que volverá a ver en poco más de una semana junto a su Madre la Virgen de las Mercedes que ya espera al Lunes Santo bajo el palio liso en el que procesionará este año.

Fotos: Eduardo Fdez. López