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Provincia. Las hermandades del Dulce Nombre y Jesús Caído de Osuna regresaron a su templo de Santo Domingo después de once años (incluye galería)


Luis M. Fernández. El pasado jueves, festividad de la Inmaculada Concepción y tras once años de restauración de la Iglesia de Santo Domingo, las hermandades ursaonenses del Dulce Nombre y de Jesús Caído regresaron a su sede canónica.

A las cuatro de la tarde y en la Iglesia de San Agustín, donde la primera de ellas ha residido todos esto años, se celebró una Eucaristía de despedida de la comunidad poarroquial y de la hermandad de la Veracruz y que finalizó con el canto del "Adiós con el Corazón" a instancias del sacerdote celebrante. A continuación, las imágenes del Dulce Nombre de Jesús, el Señor de la Entrada en Jerusalén y Nuestra Señora Virgen de los Desamparados fueron portadas por sus hermanos, acompañando con el rezo del Rosario, hasta la Plaza de España, donde esperaba la Cruz Parroquial y las banderas de las demás hermandades de Osuna.

Al mismo tiempo, un esquema similar tenía lugar en el Convento Mercedario de la Encarnación, donde ha residido la hermandad de Jesús Caído. Se da la circunstancia que el pasado Primer Domingo de Adviento, la talla del Señor fue repuesta al culto después de un proceso de restauración. Tras una Eucaristía que sirvió de despedida de la comunidad de Mercedarias Descalzas que ha acogido a la corporación, Jesús Caido y Nuestra Señora y Madre de los Dolores y también rezando el Rosario, fueron trasladados hasta la Plaza de España. Impresionante la bajada de la calle en cuesta de Luis de Molina, donde fueron cantadas sendas saetas al paso de las imágenes.

Reunidos los dos cortejos en la Plaza de España, continuaron juntos, rodeados de una multitud de fieles y devotos y bajo las luces navideñas ya encendidas, hasta el templo de Santo Domingo, donde las cinco imágenes fueron depositadas en el altar mayor.

Ayer sábado, Monseñor Asenjo, Arzobispo de Sevilla, presidió la Solemne Eucaristía de dedicación del templo.

Les ofrecemos algunas imágenes de los dos traslados.

Fotos: Luis M. Fernández.










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