Crónicas desde la Campana. Madrugada. Daniel García Acevedo

Esta pasada Madrugada, desgraciadamente, ha quedado marcado por las carreritas que han afectado a todas las cofradías de la jornada en distintos puntos de su recorrido, afectando en la Campana al cortejo de paso de palio de la Macarena.

La Cruz de Guía del Silencio se presentó a las 01,12 horas, pidiéndose la venia, como es costumbre, por escrito. El Señor pasó con su habitual andar rápido. Le cantaron tres saetas. El paso iba exornado por lirios morados. En el cortejo estuvieron representaciones de las hermandades de Jesús Nazareno de Carmona y de Salteras. La Virgen de la Concepción pasó en dos chicotás. Es tradicional que lleve en el paso la flor del Azahar.

 

 

Seguidamente, la hermandad del Gran Poder, que llegaba a las 1,52 horas. El Gran Poder tuvo una parada bastante larga en el palquillo, por estar comprimido el cortejo y no tener espacio para avanzar, y se le cantaron hasta cuatro saetas, solapándose en ocasiones unas con otras. No se puede comentar con palabras la magnificencia de la talla y su caminar por las calles de Sevilla. La Virgen del Mayor Dolor y Traspaso pasó con su habitual andar rápido, en dos chicotás. Se le cantaron dos saetas. Claveles blancos para el exorno floral de este paso.

A las 3,05 horas pedía la venia la hermandad de la Macarena. El pregonero de este año, Alberto García Reyes estuvo en el palquillo viendo el discurrir de la cofradía. Los nazarenos del cortejo del paso de Cristo pasaron de 3 en 3. El Señor de la Sentencia pasó con cuatro marchas interpretadas por la banda de la Centuria y con su característico andar. El Señor llevó la túnica de los ochitos. Primeros aplausos en Campana para el paso atrás que hizo antes de despedirse entrando totalmente en Sierpes. En los primeros tramos del cortejo del paso de palio se vieron afectados por las carreritas provocadas, lo que hizo que los nazarenos de estos tramos, niños en su mayoría, se cayeran o pasaran con los antifaces quitados y llorando, con los móviles en la mano intentando ponerse en contacto con sus familiares. Estampas realmente indignantes de lo que debe ser una estación de penitencia digna, por culpa de algunos que intentan cargarse la noche mas hermosa de nuestra ciudad. El cortejo del  paso de palio también pasó de 3 en 3 y con toda la celeridad posible para paliar el atraso provocado por estos incidentes. La Virgen de la Esperanza, que llevó el manto de malla y la saya de los homenajes, pasó con un andar muy fino, pero más aliviado que otros años, a los sones de las marchas “Pasa la Macarena” y “Macarena” de Abel Moreno, a cargo de la banda de música del Carmen de Salteras. Se pudo observar la magnífica restauración de las bambalinas del palio, a cargo del taller de Sucesores de Elena Caro. El exorno floral estuvo compuesto de claveles blancos y jacintos en las jarritas.

El diputado de Cruz del Calvario pidió la venia a las 4,57 horas. El Cristo del Calvario pasó a un andar rápido, en dos chicotás. Llevaba lirios morados y claveles rojos en las jarras del paso. Se le cantó una saeta. La Virgen de la Presentación llevaba claveles blancos. Pasó en dos chicotas. El manto es una verdadera joya de nuestra Semana Santa.

A las 5,26 comenzó a pasar la hermandad de la Esperanza de Triana. Trajo a los nazarenos de ambos pasos de 3 en 3. El Cristo de las Tres Caídas discurrió por Campana con cuatro marchas interpretadas por su banda, que lucían el uniforme blanco de gala. Los costaleros, con su habitual andar combinando pasos largos, izquierdos por delante y pasos atrás, arrancaron los aplausos entre los abonados. Después de Semana Santa será restaurado por Pedro Manzano. El paso llevó como exorno floral rosas de color rojo. El presidente del Consejo de Cofradías, Joaquín Sainz de la Maza, realizó la levantá en el palquillo, La Virgen de la Esperanza discurrió, tres marchas a cargo de la banda de música Santa Ana de Dos Hermanas. Los costaleros hicieron un gran trabajo con la Señora y la llevaron con un andar muy fino, metiéndoles un paso atrás en la calle central, que arrancó los aplausos de los abonados.

 La Cruz de Guía de los Gitanos empezó a pasar a las 6,45 horas, solo 10 minutos después de lo fijado, con todo lo ocurrido durante la noche. Los nazarenos pasaron todos de 3 en 3. El Señor de la Salud, con su andar característico, sobre los pies y lento, muchos más rápido que otros años, con cuatro marchas tocadas por la agrupación de la hermandad. Muy aplaudida esta entrada en Campana, también. El exorno floral estuvo compuesto por rosas rojas. La banda de las Nieves de Olivares interpretó las marchas “Esperanza de vida”, “Madre de los Gitanos coronada” y “Pasan los campanilleros” para la Virgen de las Angustias. La cuadrilla, a las órdenes de Alberto Gallardo hijo, pasó con un buen andar muy al gusto del público que aún quedaba en las sillas. Muy original el exorno floral de este paso, compuesto por flores variadas de diferentes colores. A las 8,02 de la mañana se metía el paso en Sierpes y terminaba, de esta manera, la Madrugada sevillana en Campana.

Fotos: Mariano Ruesga Osuna.