Provincia. Traslado de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder de Camas al altar de Quinario
Antonio Rodríguez Escaño. Mientras se van cayendo las hojas en el almanaque de nuestros sentimientos, nos damos cuenta de que tenemos encima una nueva Cuaresma, una nueva oportunidad de acercarnos a Él, de pedirle perdón por nuestros pecados, de cogerle la cruz cual cirineo.
En Camas tenemos un “pistoletazo de salida” para todo lo que se nos avecina, y que terminará con un Glorioso y Espléndido Domingo de Resurrección, cuando proclamemos a los cuatro vientos que Cristo ha resucitado de entre los muertos, por nosotros, por sus hijos.
En la fría noche del pasado viernes, trasladamos a Nuestro Padre Jesús del Gran Poder desde su altar, en la Capilla Sacramental, hasta el altar mayor de la Parroquia de Santa María de Gracia, donde le esperaba su madre, María Santísima de los Dolores Coronada. Ella vió como cargaron a su hijo con el pesado madero, como se mofaron de Él, como llegó al Calvario, incluso, la propia muerte de su único hijo. Pero el viernes Ella vió algo distinto, vió a todo un pueblo acompañando a su hijo, cuidándolo, deseando no llegar nunca al final. Cargando sobre los hombros, portando luz al camino, cantado una saeta, …, incluso viéndolo desde el objetivo de una cámara, para dejarnos a todos el recuerdo del momento.
Eso hace nuestro amigo Juanma Moreno, acariciar con su cámara cada instante, cada movimiento, para así, a su manera, explicarnos que Dios está entre nosotros y en Camas se llama Gran Poder.
Gracias Juanma y Asun.
Fotos: Juanma Moreno