La Hermandad de los Servitas da a conocer el Cartel, el Grabado y los actos y cultos del III Centenario de su agregación a la Orden de los Siervos de María

Arte Sacro. La Real Hermandad Servita se halla inmersa en el presente año en la celebración del III Centenario de su agregación a la Orden de los Siervos de María y su conversión en Venerable Orden Tercera, hecho cuyo refrendo jurídico tuvo lugar en el convento romano de San Marcelo el día 21 de julio de 1720 de manos del prior general fray Sóstenes María Cavalli. Estan ante uno de los eventos más importantes ocurridos en su dilatada historia, y sin duda el de mayor relevancia espiritual, ya que supone la adopción por la misma del carisma servita, el cual ha marcado e identificado desde entonces a la corporación hasta el extremo de que es conocida popularmente y de forma oficiosa por el nombre de la orden.

Es del todo obligado recordar y honrar la memoria del verdadero artífice y propulsor de dicho evento, el sacerdote don Juan de Lara y Villafranca, capellán de la Hermandad de Nuestra Señora de los Dolores radicada por entonces y desde su fundación en 1696, en la iglesia parroquial de San Marcos, dicho sacerdote, desde su llegada a la corporación en 1719 trabajó incansablemente por su engrandecimiento. Fue hombre de sólida formación y ferviente devoto de los Dolores de la Virgen, era conocedor de la interrelación de esta advocación con los Siervos de María y no sería ajeno al período de esplendor que venía experimentando la Orden desde el siglo anterior, por lo que en un ejercicio de clarividencia intuyó que la integración de la Hermandad en la misma sería más que fructífera, como así nos ha demostrado la historia.

Este referido esplendor en la vida corporativa -que iría "in crescendo" a lo largo de todo el siglo XVIII y hasta bien entrado el XIX-, tiene su reflejo en el que constituye el mayor timbre de gloria para los servitas hispalenses: el haber sido esta Orden Tercera la principal difusora de la espiritualidad servita y de la devoción a la Virgen Dolorosa en la antigua Archidiócesis de Sevilla -cuyo extenso territorio se extendía por las actuales provincias de Sevilla, Huelva, Cádiz y Málaga-, donde se van a suceder numerosas agregaciones o fundaciones servitas a imitación de ella o por su influencia más o menos directa. Muchas de estas fundaciones -cuyo número supera con creces el medio centenar- se formalizaban directamente en la capilla de los Dolores de Sevilla a donde se desplazaban los dirigentes de la nueva congregación para tomar el escapulario de manos del corrector de la hispalense, ejerciéndose de esa forma una especie de amadrinamiento que quedaba refrendado en los estatutos.

Ante la ausencia de conventos de frailes de la orden en el Reino de Sevilla -como es sabido la mayoría de las fundaciones estaban localizadas en la Corona de Aragón- la capilla de los Dolores se convirtió en el centro de donde se irradiaba la espiritualidad servita y la devoción a los Dolores de la Virgen a una gran parte de Andalucía Occidental. De hecho en este templo se llegaron a venerar a todos los santos y algunos beatos de los Siervos de María, conservándose todavía como preciado tesoro las reliquias de los mismos. De la solemnidad y asiduidad -casi diaria- del culto en la capilla se harán eco los grandes analistas de la ciudad como Ortiz de Zúñiga, Justino Matute o Félix González de León. Desde aquí se fomentaron y difundieron ejercicios y fórmulas de piedad surgidas de la orden servita como el septenario o la corona dolorosa, hoy plenamente asentadas en nuestra religiosidad popular.

Tras una etapa ciertamente difícil iniciada en los años treinta del siglo XX, agravados por los tristes días de nuestra Guerra Civil, la hermandad queda en un estado casi latente, contando, con solo algo más de una decena de hermanos y terciarios, pero la llegada a la corporación de un grupo de jóvenes hacia mediados de la centuria inicia una etapa de revitalización que desembocará en la adopción a finales de 1971, del carácter de cofradía penitencial aunque sin renunciar a su historia y orígenes, por lo que no sólo mantuvo su título sino que renovó los ancestrales lazos espirituales que la unen a la Orden Servita, lazos a día de hoy totalmente afianzados como lo demuestra su cercano contacto con los frailes -no siendo extraño que estos acudan alguna que otra vez a predicar cultos en la capilla- y la integración en el Secretariado Servita de Andalucía, siendo una de las Hermandades fundadoras del mismo, el cual está formado por las congregaciones seglares y cofradías de nuestra región, muchas de ellas nacidas al amparo o bajo inspiración de la sevillana. Precisamente la hermandad ha decidido invitar a las distintas fraternidades y cofradías que integran este Secretariado para que formen parte de su cortejo penitencial de forma extraordinaria el próximo Sábado Santo, en un gesto que quiere simbolizar la unión de la familia servita del sur de España y que sirva a la vez para rememorar el papel más o menos decisivo que jugó la hermandad en el origen de muchas de estas corporaciones.

Por todo lo expuesto, la hermandad no podía dejar pasar la oportunidad de celebrar esta efeméride como se merece y siempre dentro del estilo de discreción que les caracteriza. Esta celebración debe servirle para reencontrarse con sus orígenes, renovar sus lazos espirituales con la Orden de los Siervos de María y hacer que sus miembros -lo mismo que en 1720- sigan siendo testigos de Cristo en la Sevilla del siglo XXI. Para ello se ponen bajo la maternal protección y la dulce mirada de Aquella que da sentido a lo que van a celebrar, la Santísima Virgen de los Dolores. Que ella ruegue al Altísimo por estos sus siervos, que al igual que los siete santos fundadores de la orden la aclama como Reina y Señora.

En este mismo acto de presentación de los actos, se presentó un Grabado artístico conmemorativo de la efeméride, siguiendo la tradición que tiene históricamente esta corporación de editar este tipo de representaciones de las sagradas imágenes, las cuales se encuentran, sin duda, entre las más representadas en este tipo de obra. El grabado ha sido ejecutado por David Martínez Amores.

También se presentó el cartel conmemorativo de la efeméride, realizado por el hermano Francisco Holgado García que incluye el Grabado conmemorativo.

Actos y cultos a celebrar durante el 2020 con motivo de la celebración de los 300 años de pertenencia a la Orden de los Siervos de María “Trescientos años de espiritualidad Servita en Sevilla”

Presentación de un sello que se usará en todos los escritos y documentos oficiales que esta Hermandad Servita envíe durante el año y que lleva el lema de la celebración “trescientos años de espiritualidad servita en Sevilla” junto al escudo de la Orden Servita y la fecha 1720-2020.

El solemne quinario en honor de Nuestra Señora de los Dolores, a celebrar entre los días 3 al 7 de marzo a las 20,30 hotsd tendrá un carácter algo extraordinario ya que contará con el panegírico de hermanos sacerdotes de la corporación.

Manuel Orta Gotor el día 3, Francisco de los Reyes Rodríguez López el día 4, Francisco Moreno Aldea en la función principal de instituto del día 8, la predicación el día 7 del párroco y director espiritual Alberto Pereda Martínez de Osaba. Los días 5 y 6 la homilía correrá a cargo de Fray Manuel Fontanet Nento, fraile perteneciente a la Orden Servita.

El día 13 de marzo a las 21 horas, en la parroquia de San Marcos, se celebrará un concierto de marchas procesionales por parte de la Banda municipal de Coria del Rio, que dirige Camilo Irizo. Este concierto, encuadrado en los actos de este Tricentenario será asimismo un homenaje de esta Banda municipal al hermano recientemente fallecido Antonio Joaquín Dubé de Luque.

El Sábado Santo, día 11 de abril, en la estación de penitencia acompañarán las Hermandades Servitas de Andalucía vistiendo sus hábitos.

El día 19 de abril, organizará esta Real Hermandad Servita el encuentro de Pascua de la Familia Servita de Andalucía, con convivencia, formación, visitas culturales almuerzo fraternal y la celebración de la eucaristía en el Convento de Santa Isabel.

El 14 de mayo a las 21 horas, conferencia de Fernando José María de la Maza Fernández sobre la “Historia y espiritualidad de la Orden de los Siervos de María”.

Durante el mes de junio se publicará un boletín extraordinario que girará en torno a la celebración de los trescientos años de espiritualidad Servita en Sevilla.

Del 17 a 22 de julio peregrinación a Roma, celebrando la santa misa el día 21 en el Convento de San Marcelo, Casa General de la Orden Servita y lugar, donde el día 21 de julio de 1720, con firma del Prior General Fray Sóstenes María Cavalli, se dio la Patente para fundar la Venerable Orden Tercera de Sevilla.

El 3 de septiembre, a las 21 horas, conferencia a cargo del hermano Francisco Javier Monclova González que disertará sobre “Trescientos años de Espiritualidad servita en Sevilla, el Rvdo. Padre Juan de Lara Villafranca”.

El 10 de septiembre, a las 21 horas, conferencia del hermano Juan Carlos Martínez Amores que disertará sobre “La Virgen de los Dolores como Patrona de la Orden Servita. Su iconografía en la V.O.T. de Sevilla”.

El 18 de septiembre, a las 21 horas, traslado de Nuestra Señora de los Dolores y el Santísimo Cristo de la Providencia a la Parroquia de San Marcos.

El 20 de septiembre, a las 12,30 horas, celebración de la función solemne en honor de Nuestra Señora de los Dolores, con motivo de la festividad de los Dolores Gloriosos de Nuestra Señora, concelebrada por el director espiritual y sacerdotes hermanos de la corporación. Asimismo, con esta solemne función se cerrarán los actos y cultos de la celebración especial del presente año.

En la tarde de dicho día en hora por determinar, las sagradas imágenes volverán en andas a la capilla, visitando el Convento de Santa Isabel, sede de las Religiosas Filipenses.

Fotos: Juan Alberto García Acevedo.