Moises Viretti pregonó a la Semana Santa en San Leandro
Daniel García Acevedo. Ayer sábado, 29 de febrero, tras el triduo que la hermandad del Carmen de San Leandro está celebrando en honor de su titular, el Stmo. Cristo de la Bondad, tuvo lugar el III pregón a la Semana Santa que, en este año, pronunció Moises Viretti, hermano mayor de la Candelaria Madre de Dios.
Moisés quiso comenzar con un bello pasaje dedicado al Señor del Gran Poder que, recordemos, el próximo otoño visitará, entre otras, la parroquia de la Candelaria, de la que Viretti es el hermano mayor de la cofradía que allí reside. Terminó la poesía con este Padrenuestro especial:
Padre nuestro que estás en San Lorenzo
Nunca dejas de sorprender
En lo santificado que es tu nombre
Y el día de mañana el cielo contigo veré.
Tu Reino es Sevilla entregada
Y todo el año florecer
Para que siempre se haga tu voluntad
Como tiene que ser
Que nunca nos falte el pan de cada día Señor
Aquel que para vivir tengamos que comer
Y perdona aquellos que se llenan los bolsillos robando
Por aquellos que solo queremos ganarnos la vida
Con trabajo, alegría, paz, justicia y honradez
Líbranos padre mío del mal
Líbranos de aquellos que en el que toda su vida no hacen el bien
Porque su único dios y morada es el abismo
Siendo tu corazón un verdadero edén
¡Muchos han dicho, dicen y diran¡
¡Como final de la mejor oración, que asi sea o Amen¡
¡Pero mirando al cielo y al sagrario¡
¡Y a la cara de la Virgen¡
¡Que te vio en un pesebre nacer¡
¡Junto aquel mejor Santo¡
¡Aquel de la casa de David que se llamaba José¡
¡En mi casa, en mis barrios te espero¡
¡¡Para abrazarte y mi alma ofrecer¡¡
¡¡Al nazareno de mi vieja Sevilla¡¡
¡¡¡A Jesús del Gran Poder¡¡¡
Continúo con el Señor de la Bondad, que se encontraba a su espalda presidiendo el altar mayor de la parroquia de San Leandro, con otro emotivo poema, del que extraemos estos preciosos versos:
Hijo del dolor
Bendito cordero que al pecado espanta
Cuando veo a mi Cristo
Para mi siempre es Semana Santa
Paso enorme, como galeón en caoba
Eres capitán de marineros en volanta
Llévanos a puerto y camino firme
Cuando la tormenta de fuerte sobrepasa.
Cargas con nuestros pecados
Sobre el madero y tu de pura casta
El clavel rojo se lirio
Para llorar a tus plantas
¡¡La Cera llora tu corona de espinas
Y mi alma dice ¡¡basta¡¡
Sea el mes que sea, tu mirada es pura semblanza
Cuando te veo a ti Cristo mío de la Bondad
¡¡¡Para mí, siempre es Semana Santa¡¡¡
El pregonero quiso tener un recuerdo para su hermano Israel, en este pasaje dedicado a Jesús Nazareno del Silencio:
Dime Maestro dime
Porque hay tantas velitas
Ante su puerta
Que San Judas Tadeo de reojo lo mira
Para decirle lo orgulloso que está
Porque en su casa habita
Tantos sevillanos le piden trabajo
Y muchos también el pan de cada día
Pero en silencio rezamos
Sin vernos obligados
Así se nos pasa el rápido el día
Dime Israel dime
Como puedo quedan tan embrujado
Ante una cara tan hermosa y tan fina
Aquel que da la vida por nosotros
Y tiene su mirada tan perdida
¡¡Entonces Israel, el es Jesús Nazareno¡¡
¡¡El de la cruz al revés, con bandera concepcionista.¡¡
¡¡Si hermano, así es, ¡¡
¡¡Y que nunca se te olvide¡¡
¡¡Que es el Silencio de Sevilla.¡¡
Viretti terminó el pregón con un micrófono de mano, delante del primer banco donde estaba sentado su padre, al que le dedicó el final del texto con un bellísimo poema dedicado a la Macarena:
Dime padre, dime como se llama esta virgen tan guapa
Que entre varales se mece, y cara de buena
Que el pecado frena
Y las almas llena
Dime papa, como se llama esta virgen tan hermosa
Que con cara de pena
Hace llorar al azahar de Sevilla
Y a todos los altares y sus bendita cera
Tus ojos me dicen
Que aunque los Viretti sean de la Hiniesta
Los Jordán son de la muralla
De una casta plena
Muchas gracias papa, por decirme su nombre,
Y en mi regazo lo guardo, para cuando la niña venga
¡¡Y ponerle, el nombre más grande de todos.¡¡
¡¡Aquellos que la centuria custodia en divina sentencia¡¡
¡¡Y poder llamarle ,para nunca olvidarme de ella¡¡
¡¡Mi Madre Celestial, y mi hija en la tierra¡¡
¡¡Mi Esperanza Macarena¡¡
Fotos: Juan Alberto García Acevedo.