Arte Sacro
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Provincia. Cartel “Semana Santa del Aljarafe” Asociación Cultural “Lauretum”


Arte Sacro. Cartel de la Semana Santa del Aljarafe 2020, obra de Francisco José García Rodríguez (Fran García).

Presentamos el que va a ser el cartel de la Semana Santa del Aljarafe 2020, el cual, iba a ser presentado en las "Bodegas el Potro" de Villanueva del Ariscal, al que agradecen a Jose Leon Castro su colaboración en todo momento para esta asociación y para dicho acto, y a la concejalía de cultura de Olivares por su apoyo logístico en  todo momento.

El cartel, realizado al óleo sobre lienzo está dividido en tres planos. En el cartel veremos varias referencias al número tres; En la historia, el número tres guarda muchos significados divinos y absolutos. Entonces pudiéramos definir al número 3, como un número perfecto, un número tan potente como la energía que expresan aquellos que se identifican bajo el mismo.

El número tres aparece 467 veces en la Biblia. Así, el tres demuestra combinación en el sentido de unidad, como en la Trinidad: Padre, Hijo y Espíritu Santo y por lo tanto es un número especial que simboliza la Divina Perfección. Tres veces los serafines claman “Santo, Santo, Santo”. En un gran número de pasajes bíblicos, el número tres es usado para expresar períodos de fe: tres noches de vigilia, tres días, tres semanas, tres meses y tres años. A los tres días de su crucifixión, Jesús resucitó.

Cada plano contiene un mensaje. En el primer plano, vemos la silueta de olivos; en tonos verdes, haciendo referencia a la madera viva de la que nace el leño de la cruz, y por relación directa a la muerte de Jesucristo. No queremos crear confusión, puesto que desconocemos qué tipo de madera sería la Cruz del Señor, pero sí unir un elemento natural y cotidiano de nuestra comarca.

El olivo es considerado como uno de los árboles más maravillosos que hay, por su belleza y su importancia a lo largo de la historia.

A lo largo de los años se le han ido asociando numerosas simbologías, solo en la Biblia pueden encontrarse hasta 200 referencias al olivo , su fruto o a su aceite.

A través de los de los símbolos, los hombres crean un lenguaje para comunicarse con la divinidad. Los símbolos van cargados de sentimientos e ideas, y representan, de un modo abstracto las propiedades de algunos elementos. La importancia del olivo juega un papel importante cuando hablamos de simbología. Esto se debe a la gran cantidad de símbolos que se le han atribuido por todas las cualidades que reúne:

Inmortalidad

Por que vive, da fruto y se renueva desde hace miles de años. En el antiguo testamento, los hijos felices del padre Facundo se comparan a los renuevos del olivo.

Paz y reconciliación

Noé lo llamó signo de la alianza entre la naturaleza y el hombre al ser el olivo, el único árbol que no pudrieron ni dañaron las aguas después del diluvio.

La paloma con la ramita de olivo en el pico ha quedado como símbolo imperecedero de este hecho.

Cuando Jesús entro en Jerusalén, el pueblo judío salió a su paso con ramas de olivo poniéndoselas a sus pies.

Resurrección y esperanza

Después de que Jerjes incendiara la Acrópolis y yo ella su olivo sagrado, los atenienses al entrar solo vieron un montón de ruinas. Pero en la primera noche al olivo le había crecido un codo. El olivo quedo como imagen de la rapidez con la que el pueblo de Atenas, lleno de ímpetu, iba a renovarse lleno de esperanza.

Fuerza

El olivo es un árbol capaz de resistir la más duras condiciones de sequía y de pobreza de terreno.

La maza de Hércules era de madera de olivo, de ella salían raíces que se convertían en árbol cuando se clavaba en el suelo.

En un segundo plano, vemos un “sky line” de la capital, la vista que tenemos los aljarafeños de Sevilla. En tonos púrpuras, hace referencia a la Pasión de Cristo. Y sobre ella, aparecen escrito los nombres de todos los pueblos del Aljarafe. La silueta de nuestra catedral nos recuerda el triunfo de la fe.

Por último, en un tercer plano, las manos de la Santísima Virgen. Ella fue fiel seguidora de su hijo hasta el final de su martirio, y nuestra tierra, a lo largo de la historia, ha sido fiel a exaltar su figura. La Santísima Virgen es la mediadora ante Dios de todas las gracias, y por su especial protección, le profesamos una devoción especial que se distingue del resto. Siempre nos encomendamos a sus maternales y piadosas manos ante cualquier adversidad, siendo ella el sustento de nuestra fe en su ejemplo de fiel seguidora de Cristo.

Los colores que la representan están relacionados con la Luz. Símbolo de la resurrección, del renacer en la vida eterna, de la paz espiritual y el fin de nuestras vidas en la que esperamos que la Santísima Virgen nos abra las puertas del Cielo.

Si el Evangelio en definitiva es Jesús, lo que es y significa Jesús sólo se descubre a partir de su resurrección. Todo el cristianismo se puede resumir en estas tres palabras: Jesús ha resucitado.

Nos encontramos ante la cuestión más desconcertante que se haya planteado jamás al espíritu humano y ante la frontera que separa necesariamente la fe de la increencia. Para quien no cree, la resurrección de Jesús es lo totalmente inadmisible. Para quien cree, es el coronamiento de la historia, la confirmación de que la salvación del hombre no es una ilusión, sino una realidad, la victoria decisiva sobre todo mal y todo límite humano.










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