Dia 1 de confinamiento por el Corona (de espinas) Virus. Antonio Sánchez Carrasco

Ayer salimos para comprar y esta mañana a completar lo que ayer no pudimos porque ya faltaba de las estanterías. Con todo previsto, nos encerramos en casa el día que nos quedamos sin procesiones y en definitiva sin Semana Santa. Por que si de aquí a los días que quedan, todo mejora tal vez podamos asistir a las iglesias. A pesar de ello, nuestra manera de vivir la pasión de Cristo ya está cercenada. Sin ningún tipo de acritud, es una decisión que había que tomar y se ha tomado. Por ello asumiendo este trozo menos de nuestra alma cristiana por este año, vamos a tratar de mirar hacia adelante. Mi suerte es que vengo entrenado. Por una rotura de tendón me llevé cuatro meses en un sillón. Vamos a intentar desempolvar aquellas fotos que por el correr del tiempo se habían quedado atrás.

La primera con cariño para Raul, prioste de la Exaltación con quien había quedado la semana que viene para fotografiar como fundía el palio de la Virgen de las Lágrimas. El año que viene te volveré a dar la tabarra querido amigo.

La foto es un negativo escaneado, de cuando las semanas santas eran de chalequillo y carretes.

Seguimos metidos en casa la #Cuaresmaindoor. Mañana más y a ver si hay suerte y cuando pase el apocalipsis hacemos una magna de acción de gracias.

Foto: Antonio Sánchez Carrasco.