Arte Sacro
  • Noticias de Sevilla en Tiempo de Pascua
  • jueves, 9 de mayo de 2024
  • faltan 339 días para el Domingo de Ramos

Crónicas del estirón. José Cretario. ABC Sevilla


Al presidente y al vicepresidente se les empezó a descomponer la cara. Al hermano mayor del Carmen también. A pesar de la certera exposición de Manuel Román, la primera ronda de intervenciones del pleno del pasado lunes -cuestiones procedimentales, diatribas, dudas sobre qué tipo de mayoría se debía de emplear, «no es lo mismo el Polígono que El Carmen», peticiones de aplazar el debate- enmarañaron tanto el debate que los presagios no podían apuntar más hacia el negro; que el pleno se levantaría sin votación. En esas turbulencias, las palabras del hermano mayor del Buen Fin, Carlos Bourrelier, asegurando que todo estaba ya consensuado con el Miércoles Santo y que este pleno era solo de respaldo -una afirmación que yo pondría en cuarentena- terminaron de crispar los ánimos. Fue entonces cuando desde su asiento en voz alta las palabras de Juan Ruiz, hermano mayor de la Macarena -«o votamos ya o me voy»-, sirvieron como punto de inflexión para reconducir el debate.

El de la Trinidad pide que se vote ya y la mesa consigue que tras el maremagnum se inicie el proceso de recogida de votos. El ambiente que pierde dureza aunque no tensión cuando se abre la urna; comienza un escrutinio de infarto con las opciones muy igualadas pero, de repente, una concatenación de papeletas afirmativas permite que se dispare el sí y que triunfe la propuesta de estirón que los presentes reciben con tímidos aplausos. El Consejo suspira. A los afectados se les nubla la vista; lo que se pretendía, se ha logrado. ¿Y qué se ha conseguido? Una apertura controlada de la Semana Santa que evita un modelo distinto al actual y que no deja puertas abiertas.

A poco que se analicen los números de la votación, en la que el sí obtuvo una mayoría suficiente pero no abrumadora, se puede deducir que las cofradías aceptan este crecimiento pero con muchas reservas. El trabajo que le queda al Consejo a partir de ahora no tiene más remedio que tener en cuenta el espíritu del resultado si no quiere que las cañas se le vuelvan lanzas.

La próxima reunión de la junta superior prevista para el 12 de febrero se va a adelantar. Se supone que para fijar los plazos. A las hermandades beneficiadas por esta determinación no cabe más que darle la enhorabuena; pero también deben entender que el esfuerzo de la Semana Santa por hacerles un hueco debe ser correspondido con otro esfuerzo por presentarse ante la ciudad homologadas con sus pares.

Como dijo alguien al salir del pleno: «Ahora les toca a ellos demostrar que no nos hemos equivocado».

www.sevilla.abc.es










Utilizamos cookies para realizar medición de la navegación de los usuarios. Si continuas navegando, consideramos que aceptas su uso.