Provincia. Recuerden. Hoy suenan marchas procesionales en Pedrera

Será en el primer certamen que organiza la Hermandad del Cristo de la Sangre

Arte Sacro. Este próximo domingo, 11 de marzo, los sonidos inconfundibles de la ya cada vez más cercana Semana Santa serán los protagonistas absolutos del Certamen de Marchas Procesionales que, por primera vez, ha organizado la Hermandad y Cofradía de Nazarenos del Santísimo Cristo de la Sangre, con la colaboración del Ayuntamiento de Pedrera.

A las 13 horas, en la Caseta Municipal, actuarán las agrupaciones musicales de Nuestro Padre Jesús de la Redención, de Sevilla; la de Santa María Magdalena, de Arahal; y la de Paz y Caridad, de la vecina ciudad de Estepa, tres formaciones que han ido adquiriendo con el paso del tiempo una sonoridad propia como conjunto y que, donde intervienen, suelen dejar muy buen sabor de boca a los aficionados a la música cofrade.

Esta misma hermandad pedrereña se encuentra también metida de lleno en la organización de su anual Certamen de Saetas que alcanza este año su quinta edición, y en la que vuelve a contar con la colaboración de la Concejalía de Cultura municipal. Será el 25 de marzo, domingo, y participarán los saeteros Kiki de Castilblanco y Evaristo Cuevas, de los municipios sevillanos de Castilblanco de los Arroyos y Osuna, respectivamente, así como de las saeteras Nazaret Cala, de El Puerto de Santa María, la malagueña Isabel Rico y la almeriense Rocío Segura.

Con ambas actividades, entre lo cultural y lo cofrade, Pedrera quiere presentar así, con este magnífico pórtico, su Semana Santa local donde los sonidos de las marchas procesionales y los sentidos sones de las saetas han conseguido hacerse un hueco propio.

La Hermandad del Cristo de la Sangre, cuyo Hermano Mayor es Manuel Pariente Aranda, es una de las más antiguas cofradías de las existentes en Pedrera. Procesiona en la tarde del Viernes Santo con la imagen de su titular, el Cristo de la Sangre, una talla que se remonta al siglo XVI que concita la devoción de muchos pedrereños y pedrereñas y de vecinos de localidades cercanas. Con salida desde la Ermita de su mismo nombre, el paso del Cristo sigue los cánones malagueños y va portado en andas sobre hombros de pedrereños que, por regla general, tienen hecha promesa por una rogativa piadosa que suplican que se cumpla al Cristo de la Sangre, también conocido en el pueblo como “El Señor de Pedrera”.