Provincia. La Divina Pastora cautivó el orgullo pastoreño de Cantillana: "De la salida a Martín Rey" (I).

... a la criatura que ha de venir.

J. A. de la Bandera. El pasado día 8 de septiembre, como es tradición la población de Cantillana, rinde culto externo a la Divina Pastora por las calles. Es un día grande para todo el que se siente ser pastoreño y devoto de la Stma. Virgen.

Desde muy temprano comienza el sigilo y brotan lágrimas, sonrisas y todas gesticulaciones honrando a la Divina Pastora, "viva siempre la misma", "viva el ocho de septiembre", "viva la Divina Pastora", son ejemplos y jaculatorias que salen del corazón, no todo el mundo puede sentir lo que muchos pastoreños sienten cuando ven a la Virgen María vestida de Pastora.

Alrededor de las diez de la noche, Cantillana vivia su momento de eclosión con el paso en las puertas del dintel, para ya vivir uno de los momentos más algidos cuando los hermanos Villanueva, Manuel y Carlos la hacían parte de la calle y del pueblo pastoreño de Cantillana.

El acompañamiento musical corría a cargo de la banda de cornetas y tambores de Ntra. Sra. de la Fuensanta de Córdoba abriendo paso y tras la Divina Pastora, la banda de música de Ntra. Sra. de las Nieves de Olivares, que interpretó un cuidado repertorio musical.

La Virgen llega al callejón de Josefa la del Caco, y Cantillana aclama a la Divina Pastora cuando parece que sin querer, pero con la astucia de los capataces y contraguías hacen salvar esa dificultosa maniobra que la hará desembocar a la calle Martín Rey, donde la espera una lluvia de petalos y la retirada del sombrero por parte del cura. Ese momento es inenarrable y simplemente os lo muestro con fotos lo mejor posible debido a la gran cantidad de público que se agolpa en dicha calle, principal centro neurálgico de la población de Cantillana.

Mañana la segunda parte de "De la calle Real a la Plaza de la Alameda"

Fotos: J. A. de la Bandera.