“Amargura y Esperanza": descripción del Cartel de la Semana Santa de Sevilla 2008. Emilio Díaz Cantelar.
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Pintado el pasado otoño por encargo del Consejo General de Hermandades y cofradías de la ciudad de Sevilla. La técnica utilizada es óleo sobre lienzo. En el cartel se ve un fragmento del paso de palio de la Virgen de la Amargura cuando va de regreso hacia su templo acusando la transformación y el desgaste en las flores y la cera por el paso del tiempo.
No he querido representar ninguna Imagen para que cada uno pueda imaginarse “la suya”. He pretendido reflejar la sensación que nos produce un palio cuando esta pasando por delante nuestra. Por otra parte, he tratado de plasmar la importancia que tienen las Artes Aplicadas y Oficios Artísticos en la Semana Santa, y el diálogo complementario entre lo perenne y lo efímero. Dentro de lo primero, encontramos orfebrería, telas y bordados, y entre lo efímero flores y cera. La cera es luz y simboliza la vida.
En el ángulo inferior izquierdo, carente de luz, en penumbra… casi fuera del cuadro, aparece un Ángel ceroferario que anuncia e ilumina el lugar donde se encuentra la Virgen. Hay un ramo de flores sobre la peana, ramo de promesa o de cortesía que salió a Su encuentro en la calle.
Es un mundo lleno de emociones, olores, colores, sonidos y símbolos, traducido a un lenguaje de difícil comprensión. La orfebrería ornamenta basamentos, varales, querubines ceroferarios, ángeles tenantes, respiraderos… todo cincelado con maestría renacentista. Sobre la candelería, las velas iluminan la venerada imagen y la brisa de la noche dosificara su luz llenando de misterio y recogimiento todo el espacio.
El título “Amargura y Esperanza” se debe a que mis orígenes son del barrio de la feria, donde transcurrió toda mi infancia y adolescencia. Las mujeres más influyentes en mi vida, abuela, madre, hermana y esposa han sido ó son devotas de esta Virgen y sufrieron o están sufriendo la amargura y el dolor de la enfermedad. He introducido en la candelería dos velas votivas, una por mi hermana Conchi que no anda sobrada de salud; la otra por mi mujer que fue trasplantada de hígado y riñón en noviembre de 2005. Esta vela es una ofrenda de ella a los donantes de órganos que son luz y esperanza de vida, sin ellos tal vez no se hubiera podido realizar este cartel y ella no estaría entre nosotros.
En la ciudad de Sevilla, 12 de enero de 2008.
Firmado: Emilio Díaz- Cantelar
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