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El “coma profundo” de la Plaza de España


Francisco Santiago. Aún recuerdo cuando entre los años 1983 y 1984 me fui a la mili y deje a la Plaza de España en un estado lamentable. Han pasado más de dos décadas y aún no se le ve el final a una restauración que más parece una operación a vida o muerte.

 La política, una vez más, deja en “bragas” a la ciudad de Sevilla y más concretamente a uno de sus monumentos más emblemáticos. Desde mi pequeña visión como ciudadano de a pie, me parece más que penoso que se gasten dineros inútiles en eventos para cuatro gatos, conciertos para “iniciados”, concursos de grafitos, o viajes con los que Colón hubiera podido pagarse unos 100 viajes de entonces y así hasta los problemas de la restauración de la querida, visitada y, a su vez, maltratada Plaza de España.

De nuevo la Junta de Andalucía echa un pulso al Ayuntamiento Hispalense y por segunda vez, las escuelas taller que van realizando los trabajos se quedan en proyectos. La primera vez fue en el año 2006 y, ahora, los recortes vuelven a afectarles.

Sevilla es una ciudad turística por encima de todo y de todos, esa es nuestra principal fuente de ingresos y, creo, que ya está bien de ir haciendo el canelo, porque nuestros visitantes y nosotros mismos, tenemos el derecho de conocer la ciudad que se anuncia en las grandes guías turísticas, tal y como se ve en las fotos, sin vallas, desperfectos, pintadas, agresiones, etc, etc, etc...

En su momento fue la Consejería de Empleo, la Administración General del Estado, el Ayuntamiento de Sevilla y Red Eléctrica de España los que firmaron el protocolo general de colaboración para la rehabilitación del cuarto sector de bancos provinciales y la balaustrada protectora de la ría de la Plaza de España, trabajos con los que, supuestamente, en dos años se culminaría de manera definitiva la restauración del conjunto histórico artístico. Y el 2008 era el año de la reinauguración.

Un monumento clasificado como Bien de Interés Cultural, escenario de películas, imagen de nuestra ciudad en todo el mundo junto a la Giralda, emblema de la Exposición Iberoamericana del 29 y edificio en estado de “coma profundo” gracias a la desidia de nuestros gobernantes (de todas las ideologías).

Concretamente, el Consistorio tiene la obligación de realizar las obras de la balaustrada que protege la ría, puesto que es el propietario de los espacios libres de dicha Plaza.

Hemos de reconocer que no está igual que hace 20 años (quizás su peor periodo), pero los retrasos continuos en las obras, harán que cuando se pretenda concluir la última fase, de nuevo haya que comenzar con la primera.

Curiosamente la Plaza de España, obra del ilustre arquitecto Anibal González, tardó 15 años en levantarse, y ni la Expo 92 con sus millones de visitantes, pudo consolidar un monumento que simplemente fue “maqueado” para el engaño ocular del turista.

Desde los comienzos del deterioro hasta el día de hoy, por la alcaldía han pasado candidatos del Partido Andalucista, PP y PSOE. Fue en los tiempos de Soledad Becerril como alcaldesa, cuando se retomó la idea de la restauración (1997), pero dos años después se comprobaba que los puentes estaban a punto de caer de puro olvido (1999). En el año 2000 se anunció el comienzo de las obras de restauración, pero a mitad del año 2002 aún era un espejismo.

En el 2005 se había ejecutado más o menos un 60 % de la restauración, pero quedaba pendiente el 40 %, el mismo que queda al día de hoy, un año más de lo que se tardó en construirla.

Ahora, la Junta de Andalucía anuncia recortes en los presupuestos destinados a las Escuelas Taller, lo que perjudica directamente a la Plaza de España, una vez más, que ve como los trabajos pendientes a realizar en los próximos dos años, se ve sin presupuestos para contratación del personal.

Cada vez estamos dejando más claro el por qué para muchos países y visitantes, somos (literalmente), el comienzo del tercer mundo... Y aún hay que esperar a ver si los árabes no piden de nuevo la reinserción de Al-Andalus en territorio africano.

Foto: Francisco Santiago (años 80).










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