Stabat Mater histórico en la parroquia de San Andrés

Francisco Santiago. La parroquia de San Andrés y la Hermandad de Ntra. Sra. de Araceli, han montado un Stabat Mater que está ocupando la calle central del retablo mayor de la parroquia.

Se trata de una composición realizada con la imagen del Crucificado, obra anónima del siglo XVII, anteriormente colocado en un retablo de la nave de la epístola de la parroquia, actualmente desmontado.

A sus pies figura la Dolorosa arrodillada, datada en el siglo XVIII y atribuida a Benito Hita y Castillo, cuyo retablo está situado en la cabecera de la nave del Evangelio.

Gracias a la iniciativa del sacristán del templo y de la Hermandad de Araceli, se encargó una estructura de hierro para colocar adecuadamente el Cristo. Este montaje quedó concluido una vez que terminaron los cultos de la Hermandad de Santa Marta y quedará colocado hasta Pascua de Resurrección.

El altar mayor está adornado con blandones y candelabros de la parroquia y dos columnas de madera dorada que han sido restauradas por Rosa María Márquez Guerrero.

Todos estos trabajos han sido financiados por la Hermandad de Araceli, que también ha venido donando a la parroquia diversos elementos litúrgicos necesarios para las celebraciones eucarísticas.

Fotos: Francisco Santiago