Provincia. Restaurado el Santísimo Cristo de la Paz de la Parroquia de Ntra. Sra. de la Oliva de Dos Hermanas

En el último Consejo Pastoral Parroquial, de junio de 2014, se decidió, porunanimidad, restaurar la imagen del Santísimo Cristo de la Paz, que preside nuestra Parroquia desde principios de este milenio, en sustitución del Crucificado que realizara el prior de los Jerónimos de Santiponce, Rvdsmo. Padre José María Sánchez-Lamadrid en 1965, y que hoy tenemos en la sacristía, del cual es una copia de un autor que no la firmó realizada por la técnica de sacado de punto en madera de pino de Flandes.

Debido a su mala calidad y aglomerado de varias piezas de madera unidas de forma que no se puede vaciar la imagen, sin dañarla, cosa que facilita se agriete y deteriore, ha provocado que le encarguemos a la Imaginera Lourdes Hernández Peña su restauración.

La imagen ha quedado bastante bien pero, nos advierte la Artista trianera, en breve aparecerán fisuras, pues la madera es de mala calidad y el ser de una pieza hace que el movimiento, propio y natural de esta madera facilite grietas.

Ante la responsabilidad de esta Comunidad Parroquial, el Párroco, con su Consejo Pastoral Parroquial, no ha permitido que la Sagrada Imagen, bendecida el 30 de noviembre de 2005 por el Ilmo. Sr. Vicario Episcopal de Zona en aquel año, tres meses y medio después de tomar posesión de la Parroquia el actual pastor propio, continuara en tan mal estado con peligro de descoyuntarse a la vista de los fieles y no permitiendo el menoscabo del patrimonio heredado y que arranca la devoción de muchos y son santos medios de apostolado y culto divino.

Felicitamos la labor de Dña. Lourdes Hernández Peña, agradeciendo su dedicación y asesoramiento y rogamos a Dios, Nuestro Padre, que dicha imagen de su Santísimo Hijo, pobre en calidad y origen, sea grande y rico en devoción y cariño por parte de todos los feligreses y nazarenos  contemplando en Él nuestra Paz, Redención y Vida donada en su libre entrega por todos nosotros en el árbol de la Cruz, de cuyos frutos queremos alimentarnos y sacar las fuerzas necesarias para ser instrumentos de paz y alegría en nuestro mundo.

Gregorio Sillero Fernández, párroco de Ntra. Sra. de la Oliva y

San José Obrero de Dos Hermanas (Sevilla)