Provincia. Osuna celebró el IV Centenario del Patronazgo de Nuestra Señora de Consolación en un extraordinario 8 de septiembre

Manuel Pinto Montero. La Villa Ducal de Osuna ha vivido un histórico y extraordinario 8 de septiembre con motivo de la Festividad de su excelsa Patrona, Nuestra Señora de Consolación, y en conmemoración de los 400 años del Patronazgo de la Santísima Virgen sobre la Villa ursaonense. Fue el 29 de abril de 1624 cuando el Cabildo de la localidad nombró Patrona a la Virgen de Consolación que se venera en la Parroquia del mismo nombre y da nombre a este barrio popular de Osuna.

Por este motivo la Festividad del 8 de septiembre se ha vivido de una manera especial en recuerdo de ese nombramiento. Han sido muchos los actos que se han celebrado a lo largo del año pero Osuna esperaba ilusionada el día de su Patrona para verla de nuevo en sus calles. La Hermandad ha querido que la Función Principal se celebre este año en la Plaza Mayor de la localidad junto al Ayuntamiento que hace cuatrocientos años la nombró Patrona.

Nuestra Señora de Consolación es una bella imagen que el IV Conde de Ureña depositó en el siglo XVI en el que era el Convento de la Orden Tercera de San Francisco y que hoy en día recibe a su pueblo en la Parroquia de Consolación. Pasadas las cinco de la tarde se iniciaba el traslado procesional hasta la Plaza Mayor arropaba por numerosos devotos y con cantos del Coro a los que se unían los vecinos. El sol se reflejaba en su rostro, algo que no es habitual en su salida cada 8 de septiembre.

Procesiona la venerada imagen sobre paso con peana y respiraderos de plata y alumbrada por cuatro candelabros de guardabrisas en las esquinas. El exorno floral estuvo compuesto por una gran variedad de flores que perfumaron el paso de la Patrona. Lució la Santísima Virgen saya blanca bordada y manto de terciopelo azul bordado. En su mano izquierda sostiene al Santísimo Niño y en su mano derecha porta cetro dorado y la Rosa de Pasión de Cruz de Guía a los Donates de órganos, entregada durante la novena. Sobre sus sienes lució al Santísima Virgen corona dorada.

El cortejo, en este traslado estuvo compuesto principalmente por la Junta de Gobierno y hermanos cercanos que acompañaron al Simpecado y al paso de la Santísima Virgen de Consolación hasta la Plaza Mayor. En este punto se levantó un hermoso al altar junto al Convento de la Purísima Concepción. Todas Hermandades de Osuna estuvieron representadas en el Altar acompañando de este modo a la Venerada Patrona y Alcaldesa Honorario de la Villa de Osuna. La Eucaristía estuvo presidida por el Obispo Auxiliar de Sevilla y vecino de Osuna, don Ramón Darío Valdivia Giménez.

Una vez finalizada la Eucaristía se inició la gloriosa procesión por las calles de la Villa llevando a la Santísima Virgen de Consolación a los Templos del Carmen, de Santo Domingo o la Victoria. Junto al Ayuntamiento fue recibida por una alfombra de sal realizada por el Grupo Joven de la Hermandad de Fátima. En esta triunfal procesión el cortejo estuvo compuesto por todas las Hermandades de Gloria y Penitencia de la Villa Ducal, con sus característicos estandartes.

Con las primeras horas de la madrugada llegaba de nuevo a su Templo de Consolación desde donde cuida y protege a su pueblo, que en 1939 la nombró Alcaldesa Honoraria de Osuna, y la eligió como Patrona hace ahora cuatrocientos años.

Fotos: Manuel Pinto Montero.