La Divina Enfermera llenó de Esperanza la feligresía de San Martín

Arte Sacro. Ayer sábado 5 de octubre Ntra. Sra. de la Esperanza Divina Enfermera recorrió las calles de la feligresía de San Martín en su procesión gloriosa. Como en los últimos años, previamente a las 12 horas, se celebró la santa misa preparatoria de la procesión, que estuvo presidida por el obispo auxiliar de la diócesis, Teodoro León Muñoz.

Al cumplirse este año los 775 años de la fundación por Fernando III El Santo del Hospital de la Expectación, origen de la devoción a Nuestra Señora de la Esperanza Divina Enfermera, la procesión discurrió por el enclave en el que la tradición sitúa la ubicación de dicho hospital.

Este año se presentó al completo el nuevo paso que se estrenó el pasado año, anteriormente la Esperanza procesionaba en el de la Virgen del Buen Fin, finalizado con los candelabros estofados y dorado por el artista Paco Pardo. También se estrenó el pasado de terciopelo a tela de damasco del escudo frontal del faldón delantero.

El nuevo paso es una recuperación histórica del que en el año 1930 fue comprado a la Hermandad Sacramental de Nuestra Señora Reina de Todos los Santos. Anteriormente la Virgen tuvo uno propio, desde 1928 a 1930, elaborado en metal, pero no gustó a la hermandad y por eso se procedió a su cambio.

Este año los limosneros que portaron los dos hermanos que acompañaron a la Cruz alzada, han sido destinados a recoger ayudas contra la Esclerosis Múltiple.

Acompañó en el cortejo junto al hermano mayor, Manuel Romero, la delegada de Glorias, Esperanza García Perea. Más adelante una representación del Colegio de Enfermería y del Cuerpo Superior de Policía.

El paso iba a las órdenes del capataz Fco. Javier Galán y su equipo de auxiliares ya que el habitual, Ismael Vargas, se encontraba enfermo.

El acompañamiento musical fue el acostumbrado, abriendo la procesión la banda de cornetas y tambores San Juan Evangelista hasta la Alameda de Hércules, y desde allí hasta la entrada la del Stmo. Cristo de las Tres Caídas. Tras el paso la banda de música María Stma. de la Victoria, bajo la dirección de José Manuel Toscano.

A la salida se estrenó una nueva marcha procesional dedicada a la Divina Enfermera, obra del compositor malagueño Sergio Román Vázquez, titulada Esperanza, Vida y Dulzura.

También sonó por primera vez en la calle Magna Cathedralis, una marcha de gran formato inspirada en la Sevilla gótica. Una oda al pasado y a lo místico, según la califica su compositor cofrade Francisco Javier Mondaza  Hernández, que pueden escuchar aquí

Fotos: Juan Alberto García Acevedo.