Provincia. 250 años de devoción Servita en Alcalá de Guadaíra

Manuel Pinto Montero. La popular Hermandad del Cautivo de Alcalá de Guadaíra cerró el pasado sábado los actos conmemorativos del 250 aniversario de la Devoción Servita en la ciudad panadera. Fue en 1774 cuando se tienen las primeras noticias de la Orden de los Siervos de María en Alcalá de Guadaíra manteniéndose el culto mariano hasta el siglo XX cuando desapareced las imágenes titulares en el incendio de la Parroquia de San Sebastián en 1936.

Tras ello la Hermandad tiene que recomponerse reconstruyendo su Capilla y encargando una nueva talla al imaginero alcalareño, Manuel Pineda Calderón. En 1954 llega la nueva imagen de María Santísima de los Dolores a la Parroquia de San Sebastián. En 1962 se inician los trámites para la unión de la recién fundada Hermandad del Cautivo con la Hermandad Servita pero no es posible hasta el 1 de junio de 1978 cuando se produce dicha unión.

Desde septiembre de 2023 se está conmemorando la efeméride de la Fundación de la Hermandad Servita con numerosos actos y cultos siendo uno de los más esperados la salida extraordinaria de la Santísima Virgen de los Dolores que por vez primera recorrería las calles panaderas.

En el Templo Parroquial de San Sebastián tuvo lugar la Solemne Eucaristía presidida por el Arzobispo de Sevilla, don José Ángel Saiz Meneses. Numerosos fieles y devotos junto a distintas representaciones acompañaron a la Hermandad en esta jornada tan especial. Tampoco quiso faltar a la cita la ansiada y necesaria lluvia que hacía pensar que la Santísima Virgen no podría procesionar por su pueblo. Tras reuniones previas la Junta de Gobierno decidió celebrar la gloriosa procesión cuando el riesgo de precipitaciones era escaso.

A las nueve y media de la noche se iniciaba la procesión con un extenso cortejo donde estuvieron las Hermandades alcalareñas junto a otras Hermandades Servitas de Andalucía. El paso procesional se encontraba en el presbiterio del Templo mientras el cortejo de hermanos y mujeres de mantilla abandonaban el Templo. El Arzobispo de Sevilla realizó la primera levantá ya en la nave central de la Parroquia.

Faltaban apenas unos minutos para las diez de la noche cuando la Virgen de los Dolores atravesaba el dintel de San Sebastián y se encontraba con su pueblo que impaciente la esperaba. Con sones musicales de la Asociación Musical de la Algaba la Virgen de los Dolores descendía por la rampa en una noche de ensueño para los hermanos del Cautivo.

María Santísima de los Dolores procesionó en el paso de Jesús Cautivo con los faroles cedidos por la Hermandad de los Aceituneros de Utrera y con la peana de la Virgen de la Esperanza, titular también mariana de la Hermandad.  La Virgen de los Dolores estuvo a los pies de la Cruz cedida por la Hermandad sevillana de los Desamparados. Gran variedad de flores exornaron el paso donde predominaba la flor blanca. Algunos tonos malvas pudimos contemplar a los pies de la Cruz.  

Para esta magna ocasión la Virgen de los Dolores lució saya y manto negro bordado y estrenó corona de plata. En sus manos portó un pañuelo y la corona de espinas.

La Hermandad pudo completar el itinerario marcado con un caminar elegante. La Virgen de los Dolores visitó durante su gloriosa procesión el Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra. Así como los aledaños del Convento de Santa Clara y las Hijas de la Caridad. La luna se asomaba tímidamente cuando llegaba por la Calle San Sebastián mientras las campanas doblaban a duelo cuando se acercaba a San Sebastián, tal y como había ocurrido a su paso por la Parroquia de Santiago.

A la una de la madrugaba el sueño Servita llegaba su fin y lo que parecida que no podía ser se había hecho realidad y la Virgen de los Dolores procesionó por vez primera portada en un paso por las calles de su pueblo. Quizás este sea un buen comienzo para que la Hermandad vuelva a plantearse la salida de la Virgen de los Dolores al llegar los días santos de la primavera.

 

Fotos: Manuel Pinto Montero.