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Una Navidad atípica. Manuel Enríquez Becerra


Este año el tiempo de Navidad, es distinto a los anteriores como todas las fiestas, debido a la pandemia del coronavirus. La gente no tiene ganas de celebraciones, sobre todo las personas mayores, muchas porque han sufrido la enfermedad del covid-19 y otras porque a causa de la pandemia se le han marchado con El Padre; alguien de sus seres queridos. 

Esta será una Navidad atípica, no tendremos ganas de salir a las calles como en años anteriores, ni gastaremos tanto en consumismo. 

Estaremos más confinados en nuestras casas, por temor a coger el virus, que en cualquier momento lo podemos coger. 

No habrá tantas celebraciones ni comidas de empresas, ni habrá tantas celebraciones, de reuniones de compañeros de trabajo, ya que las limitaciones son mínimas entre personas. 

También la feria de belenes, que se montaba a los pies del Archivo de Indias ha sido suspendida a causa del covid-19. 

El ambiente en sí, no es el mismo que en años anteriores. Los coros de campanilleros y las reuniones en grandes dimensiones, están restringidas, e incluso suspendidas, por el mismo motivo antes reseñado. 

Nos tendremos que conformar con lo que nos ha tocado vivir, que es resignarnos y confinarnos el máximo tiempo posible; ya que el virus lo tenemos con nosotros, y en cualquier momento nos puede acechar. 

Es una lástima que en el siglo XXI ocurran estas cosas con los adelantos que hay; y que venga una pandemia en contra de la salud para que vivamos asustados, y confinados en nuestras casas por temor al virus. 

La Navidad siempre ha sido motivo de alegría y de paz, y este año la viviremos con incertidumbre, y con miedo. 

Tampoco habrá tanta fiesta ni tanto jolgorio, ni en las casas ni en la calle, por aquello de que hay que guardar las distancias de seguridad, entre las personas. 

El consumismo sufrirá las consecuencias, de que no se consumirá como en años anteriores, estaremos más retraídos a la hora de las compras. 

Ya se ha hecho público de que no habrá fiesta de La Epifanía; es decir que no habrá cabalgatas de Reyes Magos, pero según dicen: los tres Reyes Magos vendrán este año, montados en globo es decir que los veremos llegar desde las alturas. Y los niños, y mayores no disfrutaremos ese día, de la noche de la ilusión, en la que salíamos a ver las cabalgatas de nuestras ciudades y pueblos, a llenarnos los bolsillos de caramelos, nos conformaremos con que lleguen aunque sean en globo, pero todo será atípico.  

Nos tendremos que conformar con unos Reyes Magos distintos a nuestra forma y manera, que en años anteriores, y nos intercambiaremos los regalos los unos a los otros, eso sí, con la misma ilusión que en años anteriores 

Esperemos que el virus se vaya pronto de entre nosotros, y volvamos a hacer una vida normal, sin miedo y sin mascarilla, como la que llevamos ahora con la pandemia. 

Que el año que se nos avecina de 2021, entremos con mejor pie, para llevar una vida más llevadera, y no vivamos asustados, y vivamos felices y en paz. 

No nos llama tanto la atención el alumbrado navideño, no tenemos la misma ilusión en estas fechas tan entrañables, como en años anteriores que todo era un festín. Lo que deseamos es que haya una vacuna, lo antes posible, y se solucione todo de una vez.  

Pero de lo que se trata en estos momentos es de salvar vidas, que todos los días mueren muchas personas. Y esperemos que después de las navidades y fiestas, no haya otra nueva ola de coronavirus.   

Os deseo a todos, unas felices fiestas y un feliz año 2021 que venga con mejor pie, que el año que despedimos, que vaya la que nos ha traído con la pandemia.

Manuel Enríquez Becerra.   

Fotos: Juan Alberto García Acevedo y Antonio Rendón.










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