El canónigo Manuel Sánchez dona a la Hermandad la primera reproducción de San José Obrero. Bendición de una nueva vara de azucenas

Arte Sacro. En la tarde del pasado miércoles 28 de abril, la Hermandad de San José Obrero, que viene celebrando el anual Triduo al Santo, recibió por sorpresa de la mano del predicador del culto, Manuel Sánchez Sánchez, canónigo de la Santa Iglesia Catedral y vecino desde la infancia del barrio, el busto realizado a partir de la imagen de San José Obrero en los talleres de los Salesianos de la Santísima Trinidad durante la restauración de la talla en el año 1960.

Como bien leyó antes de iniciar la Eucaristía del primer día de Triduo, la imagen de San José Obrero fue adaptada a la iconografía de “Obrero” despojándolo del Niño Jesús, a día de hoy aún desaparecido, en los talleres de la casa salesiana en donde uno de aquellos escultores, aprendices por aquel entonces, realizó un molde reproduciendo la faz del bendito carpintero que allí se encontraba restaurándose para ser entronizado en la parroquia.

Los avatares del destino quisieron que el predicador conociera al escultor, el cual regaló ese molde que fue a parar a su madre, María Sánchez vecina muy cercana a la Parroquia y devota de San José Obrero, tanto que lo llamaba como apelativo cariñoso “Joselito”, caminando tras de él en todas las procesiones y encomendándose en sus momentos más difíciles hasta su muerte.

Por otra parte también ayer fue bendecida una nueva vara de azucenas que se ha realizado en el taller de los Hermanos Delgado López, autores de la orfebrería de San José Obrero. Esta será la tercera vara de azucenas que lucirá el santo en su mano izquierda, con la que se ayuda a caminar, mostrando así su pureza y castidad portando este atributo iconográfico.

Detalles de la obra:

Se trata de una obra de orfebrería totalmente cincelada que recoge en su tramo final un ramo de azucenas símbolo de la castidad y de la pureza.

Un conjunto de seis azucenas con capullos y hojas conforman este ramo con cierto arte imaginativo y consiguiendo una obra elegante con unas medidas aproximadas de 152 cm en la vara y 22 cm en el ramo, siendo su altura total 174 cm.

Esta pieza ha sido realizada con las más puras técnicas del arte de la orfebrería, artesanía a mano por el taller de la Familia Delgado López.

San José Obrero, es para la familia Delgado López que regenta este taller de orfebrería un gran modelo en la fe, por ello dicha obra se ha realizado con el corazón de lo que simboliza para ellos recordar la infancia y juventud junto al carpintero bendito y la devoción que su madre, vecina del barrio y devota del titular al Santo Patrón.

Fotos: F. Sánchez V./V.M. Cascales V.