Azul Baratillo. Antonio Sánchez Carrasco

Ahora que está tan de moda criticar las salidas extraordinarias cofrades. Ahora que parece que sólo los cofrades usamos los servicios públicos y la calle en general. Ahora que incluso desde las filas sacras se critica el número de imágenes coronadas. Ahora me toca a mi disfrutar. Yo que ya tenía a la Virgen de la Caridad coronada de manera indoor, como le gusta ahora a la nueva hornada de rancios, como si tuviéramos que avergonzarnos de mostrar nuestra Fe en público, tengo la suerte de que mi otra Virgen que representa el misterio de la Piedad y al Cristo de la Misericordia van a ser coronados canonicamente, dándole una dignidad más que merecida.

Piedad es el recuerdo de un medio adolescente que llegó del Cerro del Águila hasta el número 13 de Adriano y que cada Miércoles Santo la veía en las calles largas desde los primeros tramos de cordón blanco y con el tiempo desde el tramo de penitentes. La belleza dormida de un Cristo en las manos de una Madre dolorida siempre su manto y la mano caída del Señor de la Misericordia a la que poder cogerte esos días en los que la lluvia de la vida te calaba los huesos. Con el tiempo apareció en mi vida Lola, el sueño hecho mujer que esperé largo tiempo. Ella traía en el ADN el cordón rojo que te ata de por vida a la Niña dolorida de la calle Adriano y el sábado cogió su cirio y escoltó a Nuestra Virgen hasta donde será coronada el próximo sábado. Yo la esperaba subido en el Postigo del Aceite, allí donde mi amigo Fernando me acoge cada vez que le pido el favor. Y pasó la riada azul que antecede a la desconsolada y joven Madre de los ojos poblados de lágrimas y la belleza simpar, y es que mira que es fácil tener Fe en Sevillla con estas imágenes tan hermosas, pero claro la que sientes como tuya te parece la más hermosa de todas. Y por allí pasaron todos debajo de mi. Desde Ricardo llevando la Cruz de guía hasta José Ramón incrustado en la primera fila de la banda del Sol. Una noche inolvidable prólogo del sábado que viene. Y por unas horas me importó un pimiento las opiniones de los que creen que hay demasiadas procesiones desde dentro de las filas sacras y desde fuera. Y viví la ensoñación de una noche en la que la suerte de quererte Piedad llenó mi alma de una alegría inusitada.

#LosLunesAlSol

Foto: Antonio Sánchez Carrasco.