Restauración de la imagen de Santa Joaquina de Vedruna del Colegio del mismo nombre

Arte Sacro. En días pasados, tras casi un año, ha vuelto la imagen de Santa Joaquina de Vedruna, restaurada magníficamente por Dario Ojeda Cordero, antiguo alumno y restaurador que, tras haber trabajado con cuidadoso esmero y aplicando los criterios de restauración vigentes, ha recuperado el estado original de la obra. La restauración de la talla ha corrido a cargo del AMPA del colegio. La preciosa imagen se encontrará a la contemplación de todos en la recepción del colegio para recibir vuestra veneración.

La intervención realizada ha resultado de cierta complejidad debido al mal estado en el que se encontraba la imagen que, además de sufrir graves problemas estructurales, presentaba diferentes repintes e intervenciones que alteraban el estado original de la obra. 

Al tratarse de una imagen de interés y cierta calidad se llevaron a cabo una serie de estudios previos. En primer lugar, se procedió a una revisión histórico-artística de la imagen y, tras ello, a un estudio científico para determinar el estado de conservación, las alteraciones y problemas que pudiera presentar, realizándose diversas radiografías y un TAC.

A raíz de esta primera fase analítica, se descubrió que la imagen presentaba un ataque activo de insectos xilófagos, actuándose de inmediato con un tratamiento para su eliminación. Además de ello, se subsanaron los problemas estructurales de la imagen realizándose la extracción de numerosos clavos, y adaptando la imagen para futuros traslados y procesiones. 

Posteriormente al tratamiento estructural se procedió a la eliminación de repintes e intervenciones que alteraban la obra, finalizando con la reintegración cromática con el objetivo de devolver la visión de la policromía original de la imagen. 

Destacan especialmente el color primigenio del vestido de la niña tras la supresión de repintes, o la aparición y recuperación del ribeteado dorado original en el hábito de la santa. 

Además de los trabajos de conservación y restauración, se estrenan dos nuevas piezas que completan y embellecen el conjunto de la talla escultórica. Se trata de una peana “de carrete” en madera de pino y barnizada, y un aro de metal plateado realizado por la orfebre Belén Hernández.