Arte Sacro
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Provincia. Viernes Santo en Pilas


 Víctor Mudarra Fuentes. Tras una esplendorosa jornada de Jueves Santo, donde Pilas disfrutó con la Cofradía de su Patrona, en este caso Dolorosa bajo palio, la cual estrenó el tocado (omisión en el artículo anterior) regalo de sus camaristas y hermanas devotas y  como no, disfrutando de su Hijo,  el Santísimo Cristo de la Vera Cruz; tras una madrugada de ensueño por las calles de nuestra capital hispalense, donde los momentos vividos, las emociones, los sentimientos ante las portentosas imágenes de la madrugá sevillana ya forman parte de nuestro recuerdo…. ; amanece un Viernes Santo con un radiante sol, nada que ver con los años anteriores donde la lluvia era la gran y esperada protagonista de la jornada.

La mañana se vive en el templo parroquial de Santa María La Mayor, donde la Real, Ilustres y Fervorosa Hermandad de Penitencia y Cofradía de Nazarenos del Santo Entierro de Nuestro Señor Jesucristo, María Santísima en su Soledad y Dulce Nombre de Jesús, o lo que es lo mismo, la Hermandad de la Soledad…..expone a la contemplación de los fieles a sus queridos titulares en sus pasos procesionales dispuestos para la Estación de Penitencia de la noche.

El paso de la urna del Santísimo Cristo del Descendimiento, no presentaba ninguna novedad, quedando aún por concluir la fase del dorado de la canastilla y los respiraderos del mismo. Claveles sangre de toro era el único exorno floral que disponía tan bellamente en este paso que es acompañado por la Capilla Musical de la banda de la Sociedad Filarmónica de Pilas, que a la salida interpretó una marcha fúnebre como ya ocurriese el pasado año.

  

La Señora del Viernes Santo, espléndida como siempre, lucía el estreno de una cruz pectoral, obra de la orfebrería de Marmolejo y regalo de un hermano devoto y que ya luciese en su Besamanos.

El exorno floral, abundante, característico de este paso de palio que sorprende cada mañana de Viernes Santo con la novedad del mismo, pues la Hermandad modifica las flores cada año buscando lo más novedoso.

  

A las nueve de la noche se abrieron las puertas de la Iglesia Parroquial, entrando el paso de palio a altas horas de una fía de la madrugada, en torno a las tres y media de la mañana a los sones de “Amarguras” de Font de Anta, dando por concluido los días de pasión en Pilas pues… el sábado ya se empieza a vivir la fiesta por antonomasia pileña, la Resurrección de Cristo, a la vez que la fiesta de la Patrona en sus afamadas Carreritas.

Fotos: Manuel Rodríguez Cuesta 










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