X años de Arte Sacro. Los inicios de un joven periodista en Arte Sacro. Juan Manuel Labrador Jiménez

Estaba casi recién llegado a las aulas universitarias, y por aquel entonces no disponía de conexión a internet en casa. El turno de tarde en la facultad le permitía llegar con tiempo a las aulas de informática antes de que comenzase el horario lectivo vespertino, y entre otras cosas no podía obviar su visita a aquel portal que tanta información cofradiera deparaba: Arte Sacro.

Era como un hermoso escaparate donde desfilaban todas y cada una de nuestras hermandades y cofradías, ya fuesen de penitencia, de gloria o sacramentales. Y todos los días era fiel a la cita de las tres de la tarde, hasta que, al poco tiempo, internet llegó a su domicilio, y fue entonces cuando descubrió aquella hora mágica ya evocada días atrás en otro de los artículos publicados en estos días, la de las doce de la noche, cuando en la pantalla aparecían las noticias de una nueva jornada que comenzaba siempre puntual.

Poco después, aquel joven conoce al creador de una productora, a quien le encarga la grabación de la procesión de su corporación letífica, y desde entonces comienza a trabajar con aquel hombre, a través del cual acaba conociendo, al fin, a los responsables de aquel portal cofrade en internet, y a partir de ahí comenzó a redactar sus primeras noticias, a realizar sus primeras fotografías –afición hoy ya abandonada pero no descartada de retomarla sabe Dios cuándo– y a cubrir los primeros eventos.

Año 2004. Nace Arte Sacro, nace PM Videos y quien esto suscribe llega a ambos lugares que casi son uno solo. Sí, amigos, el joven del que les hablo no es otro que el firmante de este escrito, y sí, aquí tuvieron lugar los primeros pinitos periodísticos. Luego llegaría a mi vida la radio y la televisión, y las retransmisiones, y las presentaciones de programas, y los artículos en revistas especializadas… Pero mi origen está aquí, no en otro lugar, aquí, en Arte Sacro.

Por ello, con motivo de esta década de vida no podía dejar de participar también en esta gozosa efeméride. Cuando llegué a esta web de la mano de Pedro Merino conocí al bueno de Paco Santiago y a ese personaje alocado que es Pepelu Martínez, profesándole a ambos un enorme cariño. Fue aquella época en la que Arte Sacro éramos, además, Fernando A. Morillo, Juan Antonio de la Bandera, Joaquín Corchero –que era un niño, fíjense– y un servidor. ¿Verdad que os acordáis, queridos compañeros de faenas, de aquel verano de 2005 en el que nos responsabilizamos durante el mes de  agosto del mantenimiento de la web mientras Paco estaba de vacaciones? ¡Qué grandes momentos, qué hermosas vivencias!

Inolvidable también la llegada de aquellos desconocidos hermanos Acevedo que hoy son también alma, vida y corazón de Arte Sacro, y vean si le debo cosas a este grupo de buenas personas y cofrades, que en mi última aventura periodística, el querido Dani Acevedo ha estado a mi lado cubriendo eventos como el vía crucis del Año de la Fe, el Pregón de la Semana Santa de Francis, el informativo de “María+Visión con el Consejo” durante los días de la pasada Semana Santa, la coronación de la Virgen de los Dolores de Camas o la procesión de la Virgen de los Reyes.

Arte Sacro viene conmigo, y yo voy con Arte Sacro. Ojalá pudiese dedicarle a este portal el mismo tiempo que en mis años de mayor lozanía, donde tuve también aquella oportunidad, con tan sólo 22 años, de entrevistar a Antonio Burgos, ¿recuerdas, Paco Santiago? He sido un auténtico privilegiado, porque también, gracias a Arte Sacro, gozo de la amistad de Mariano Ruesga, de Javier Montiel, y ya posteriormente, de Sebas Gallardo, de Javi Jiménez, de Eduardo Fernández, de Fran Granado…

¡Qué poquitos éramos hace 10 años! Y qué gran equipo hay hoy, aunque yo solamente me mantenga como colaborador puntual. Sentía la necesidad de relatar, algún día, cómo fue mi llegada a Arte Sacro, y tenía que manifestar en voz alta todo lo que me ha aportado porque, no lo duden, si estoy donde estoy, a pesar de lo difícil que es hallar un puesto de trabajo en condiciones como periodista, es porque primero fui redactor de Arte Sacro.

Muchas gracias, Paco, muchas gracias, compañeros, porque sin vosotros, mi vida y mi formación no hubiese sido lo mismo. ¡Feliz aniversario y que lleguen pronto las bodas de plata!

Foto: Juan Alberto García Acevedo