Historias de la Cuaresma. El arte de los altares de culto

Francisco Santiago. La Cuaresma llegó de nuevo a la ciudad, aunque aquí en Sevilla parece como si nunca se fuera, perenne en cada uno de los meses del calendario.

Parte de este esplendor lo vivimos en la cantidad de actos y cultos que nos ofrecen las hermandades, conferencias, conciertos, convivencias y, por encima de todos, los cultos.

Parte de culpa de que estos altares hayan traspasado las fronteras temporales son los priostes que se desviven, en multitud de casos, en ofrecernos nuevos montajes nacidos de la imaginación puesta al servicio de la religiosidad popular.

La cera juega un papel importantísimo y cada vez aflora más ese espíritu de las fotos de antaño que nos ofrecían altares efímeros dignos del elogio de reyes. Hoy algunos de los equipos de priostía se afanan en acercarnos aquellas visiones en sepia, como son el caso de El Calvario, que nos ha regalado un altar que no recordaban ni los más antiguos.

En Santa Marta, como se muestra en la foto, Ventura se afana en dar luz al Cristo de la Caridad, mientras en San Lorenzo los Santizo son los encargados de encender esta otra Pasión que se hace más latente y patente en plena Cuaresma.

Fotos: Francisco Santiago