El Cristo de las Cinco Llagas abrió la Cuaresma

Eduardo Fdez. López. La hermandad de la Trinidad celebró, en la noche de ayer, Miércoles de Ceniza, y como ya viene siendo habitual el primer día de Cuaresma su tradicional Vía Crucis con la imagen del Cristo de las Cinco Llagas.

Una vez finalizó la santa misa y cercanas las nueve de la noche la hermandad del Sábado Santo comenzó el ejercicio de este acto piadoso al que suele asistir bastantes cofrades y con el que dan el “pistoletazo de salida” a una cuarentena que cargada de quinarios, septenarios, besapies, vía crucis, etc. nos devolverá un año más a la Semana Grande Sevillana.

El cortejo encabezado por la cruz parroquial seguida de algunos tramos de hermanos con cirios discurrió por las feligresías de San Julian y  San Marcos entre otras. La imagen del crucificado visitó en su recorrido entre otros templos los Conventos de Santa Isabel, Santa Paula, la Capilla de las Religiosas Siervas de María y la capilla de la hermandad de Los Servitas.

Las primeras estaciones se rezaron en la puerta del Beaterio de la Santísima Trinidad y en la casa donde nació Santa Ángela de la Cruz, la Santa sevillana por excelencia.

Este año el Cristo de las Cinco Llagas era portado con mayor comodidad por sus hermanos al estrenarse la parihuela, ya que antes los hermanos tenían que cogerlo directamente por la cruz.

Si no han tenido oportunidad de asistir a este vía crucis, a continuación les mostramos algunas fotografías del mismo.

Fotos: Eduardo Fdez. López.